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    PRODUCCIÓN DE MORA HÍBRIDA (ZARZAMORA)

  

  

 

1. REQUERIMIENTO DEL CULTIVO

    1.1. Clima

    1.2. Suelos

    1.3. Variedades

    1.4. Plantación

    1.5. Fertilización

    1.6. Poda

    1.7. Sistema de soporte

    1.8. Control de malezas

    1.9. Control de plagas y enfermedades

    1.10. Riego

2. ANÁLISIS DE MERCADO

    2.1. Mercado Estados Unidos. Importaciones y Exportaciones

    2.2. Mercado europeo. Importaciones y Exportaciones

   

Autores: Iván Gallardo A., Ing. Agr. M.Sc.; JulioCuadra G., Ing. Agr.

Instituto de Investigaciones Agropecuarias INIA - Comisión Nacional de Riego CNR

  

  

    1. REQUERIMIENTO DEL CULTIVO

        1.1. Clima

A pesar de considerarse como clima óptimo para el cultivo de moras los climas relativamente frescos, libres de lluvias en el período de cosecha, y con frío invernal de 800 a 1.200 horas frío, se ha observado que este cultivo se distribuye ampliamente en distintas zonas agroclimáticas del mundo. En Chile las moras adquieren su mayor desarrollo desde la región Metropolitana hacia el sur. Las variedades híbridas, en general requieren de climas más benignos por ser más sensibles al frío.

El factor climático limitante para la mora es el frío invernal, principalmente para las variedades híbridas. Actualmente se está trabajando para desarrollar híbridos con mayor resistencia al frío y así expandir el cultivo hacia áreas más frías.

Una alta humedad atmosférica favorece el desarrollo de las plantas, sin embargo, esta especie, a diferencia de la frambuesa, presenta cierto grado de resistencia al déficit o exceso de agua debido a su mayor profundidad y extensión del sistema radical.

En moras, el efecto negativo del viento es menor que en el caso de las frambuesas. Esto se debe a que la mora híbrida es más resistente y tiene un manejo cultural distinto.

        1.2. Suelos

Se adaptan a diversos tipos de suelos, siempre que éstos sean permeables no muy alcalinos ni muy arcillosos, pero ricos en materia orgánica. Solamente variedades rastreras soportan suelos pesados.

Se desarrollan bien en suelos con pH 6-7,5. En comparación con las frambuesas, las moras toleran en mejor forma suelos drenados y arcillosos.

        1.3. Variedades

Las variedades que actualmente encontramos se han originado de interacciones genéticas entre varias especies que presentan características morfológicas heterogéneas, por lo que no es extraño que estas variedades difieran entre sí en cuanto a su hábito de crecimiento y al tipo de fruta. Por esta razón, las moras se han clasificado según su habito de crecimiento (erecto, semierecto o rastrero) y la presencia o ausencia de espinas (característica que puede ser otorgada por la hibridación). De la combinación de estas dos características morfológicas se han obtenido numerosas variedades que se agruparían en la siguiente clasificación: Erect Thorny, semierect thonless, western tralling, dewberries o híbridos entre moras y frambuesa.

Las variedades de mora pertenecientes a la clasificación erect thorny (por ejemplo Cherokee, Eldorado, Darrow) se caracterizan por ser erectas, algunas veces pueden ser arqueadas, presentan espinas en sus cañas y sus primeras cañas emergen de yemas adventicias de la raíz y corona. Los racimos de frutas con grandes y de fruta dulce. La mayoría de estas especies son resistentes al frío.

Se puede decir de las variedades tales como Logan, Boisen y Olallie que pertenecen al grupo de los western tralling (algunas veces llamados Dewberry) se caracterizan por presentar cañas semierectas y espinosas, y frutas de gran tamaño.

        1.4. Plantación.

Como primera medida es importante asegurarse que el material de plantación está libre de enfermedades, aunque la mora no es tan susceptible a virus y otros patógenos como la frambuesa.

El suelo debe estar bien preparado y si fuese necesario, debe ser enriquecido como materia orgánica (20 a 40 ton/ha. De guano de vacuno o de oveja). El mejor suelo para la plantación es aquel en que el año anterior se haya cultivado algún cereal o leguminosa. Nunca se debe plantar después de papas, tomates o cucurbitáceas, debido a que en el suelo pueden quedar muchos hongos patógenos que posteriormente dañarán la plantación.

La distancia de plantación es muy variable, dependiendo del tipo de planta: erecto, semierecto o rastrero. Varía también según el vigor de la variedad, según las maquinaria a utilizar y el sistema de soporte.

En el Cuadro Nº1 se indican las distancias de plantación más usadas.

 

  

Cuadro Nº 1. Distancias de plantación de moras.

SOBRE HILERA (m)

ENTRE HILERA (m)

1,20

2,40

2,40

2,40

2,40

2,70

2,70

2,70

2,70

3,00

(Fuente, Sudzuki, F.1985)

 

 

En cuanto a la época de plantación, la mejor es a fines de invierno o principios de primavera. Jamás se debe plantar a fines de primavera o principios de verano, cuando ha comenzado a aumentar notoriamente la temperatura, ya que la alta temperatura del suelo impedirá un buen araizamiento. En caso que fuese inevitable esta opción, después de la plantación se requieren riegos frecuentes.

Las plantas deben ser transplasntadas inmediatamente después de llegadas al campo, para evitar la deshidratación de la raíz, si no es así, deben ser barbechadas y si han sufrifo algún grado de deshidratación, se deben sumergir en agua barrosa antes de ser plantadas. Las plantas deben ser enterradas solamente hasta el nivel de sus raices, en suelo húmedo y bien apisonado

        1.5. Fertilización

Una adecuada fertilización se realiza según una pauta de análisis de suelo y foliar, si no se realizase este análisis un buen indicador de los requerimientos nutricionales del cultivo sería el crexcimiento de la planta.

El nitrógeno es el nutriente más importante debido a que se relaciona directamente con la producción. Es responsable del control del crecimiento vegetativo, y cuando existe una deficiencia de éste el crecimiento de brotes, tamaño de hoja y rendimiento disminuyen, por otra parte, un exceso de nitrógeno produce demasiada vegetación y la fruta podría ser afectada.

La primera fertilización debe ser realizada durante la preparación del terreno antes de la plantación. Esta aplicación debiera cumplir los requerimientos inciales del cultivo.

Desde la segunda temporada en adelante, como recomendación general, se sugiere aplicar entre 55 y 112 Kg/ N7Ha (100 a 200 Kg urea), aplicada sobre la linea de plantación. Se debe realizar en primavera, antes de que comience el crecimiento de la temporada. En caso que el nitrógeno fuese aplicado en forma de guano, se debe aplicar en dosis de 13 a 18 ton/ha a fines de otoño o en invierno cuando las plantas están receso.

Es importante aplicar suficiente nitrógeno después de la plantación para obtener un crecimiento rápido y gran cantidad de madera frutal. Una vez que las plantas se han establecido, es recomendable aplicar una cantidad moderada de nitrógeno, el objetivo es mantener un hábito de crecimiento bien balanceado de la planta. Este elemento es uno de los más importantes, especialmente para variedades como Boisenberry. Se puede aplicar en cualquiera de sus formas comerciales.

Elementos como fósforo y potasio no son indispensables en el cultivo de este frutal, y se deben aplicar de acuerdo con la calidad del suelo. Para la aplicación de guano se puede utilizar preferentemente el de vacuno o de gallina, pero en cantidades limitadas para no producir deficiencias de zinc.

        1.6. Poda

Existen dos tipos de poda: de verano y de invierno.

La poda de verano debe realizarse inmediatamente después de la cosecha. Se debe eliminar toda caña que haya fructificado y las más débiles, ya que estas producen frutos pequeños que no contribuyen sustancialmente a la producción.

Las cañas, además se deben despuntar para así forzar la brotación de ramillas laterales sobre las cuales se basará la producción de la siguiente temporada.

El número de cañas a dejar depende de la variedad y la distancia de la plantación usada. Se recomienda dejar un máximo de 9 cañas por planta para obtener una alta producción con fruta de buena calidad.

Después de la poda se deben amarrar las cañas, especialmente en climas muy luminosos, ya que las cañas nuevas son muy susceptibles a quemaduras por el sol, solo en climas poco luminosos el amarre puede ser realizado en invierno.

La poda de invierno puede ser realizada tanto en esta estación como a principios de primavera, antes que empiece la brotación. Consiste en rebajar las ramas laterales superiores a una longitud de 35 cm.

Deben eliminarse todos los brotes que se desarrollen bajo el primer alambre. Esta poda favorece la formación de fruta de mayor tamaño y mejor calidad.

        1.7. Sistema de soporte

Generalmente se debe usar el tipo espaldera de 2 o 3 alambres, el diámetro de los postes a usar debe ser de 3 ó 4 pulgadas. Cada poste se coloca más o menos a 10 m uno del otro, excepto en la variedad Olallies, en cuyo caso deben colocarse a una distancia de 3 m debido a que es una planta muy vigorosa. El primer alambre se ubica a 45 cm del suelo, el segundo a 30 cm del primero y el último en el extremo superior del poste.

La postación debe hacerse junto con la plantación o tan pronto las plantas alcancen la altura adecuada para ser amarradas, la colocación temprana de los postes aumentará la producción el primer año.

        1.8. Control de malezas

Una de las labores culturales más engorrosas y de mayor costo en este tipo de cultivo es la eliminación de las malezas, especialmente las limpias de las líneas de plantación, las cuales deben realizarse superficialmente para no dañar las raíces, por eso se recomienda hacerlo en forma manual 4 a 6 veces al año, según el grado de enmalezamiento. Malezas como Chufa, Correhuela y otras no tienen control químico selectivo en las hileras de plantación y su control mecánico es de poca efectividad. Debido a lo anterior es recomendable para el cultivo de estos frutales utilizar suelos libres de malezas perennes, si esto no es posible se debe realizar un barbecho de verano en donde se combinen la preparación de suelos, riegos y aplicaciones de herbicidas sistémicos para llegar a la plantación con la población de malezas perennes disminuida y manejable durante el cultivo.

Las moras tienen cierta resistencia a los herbicidas, por lo cual se sugiere el siguiente programa de control:

A principios de primavera, antes de la emergencia de las malezas o antes que sobrepasen los 10 cm, aplicar Simazina 80 o 500 F, mezclada con Paraquat, Sinox o Casaron. No deben mojarse con herbicidas las cañas o brotes de mora que estén emergiendo. Casaron solo debe usarse a temperaturas inferiores a 16º C; en caso que sean mayores, debe regarse inmediatamente después para que no se volatice.

Por lo general se recomiendan dos aplicaciones: la primera entre Abril y mayo, con una dosis de 2-4 de ingrediente activo de Paraquat, y la segunda en septiembre-octubre con una dosis de 1-2 kg i.a. Las dosis deben ser mayores en suelos sueltos, arenosos o con mucha grava.

    1.9. Control de plagas y enfermedades

Las moras generalmente son más susceptibles a plagas que las frambuesas, a excepción de Dewberry que se presenta más vigorosa y sana.

La principal plaga, especialmente en Logan y Boysen, la constituyen los thrips, que permanecen sobre ellas durante todo el año, o sobre las malezas durante el invierno. Cuando la planta comienza a florecer, este insecto atraído por el néctar, cubre un gran número las flores. No causan daño a la fruta, pero permanecen en los drupéolos, lo que disminuye la calidad comercial de los frutos. El mayor daño causado por este insecto es en la hoja.

Los áfidos también ocasionan daño en la hoja, provocándoles un envejecimiento prematuro.

Las enfermedades más conocidas en las moras son Oidium, Verticillium, Agallas del cuello y Anthracnosis. Esta se presenta como lesiones púrpuras en las cañas y las hojas, entre otros síntomas. Se puede controlar aplicando fungicida o también se pueden remover las cañas viejas después de la cosecha.

    1.10. Riego

La mora en su hábitat nativo es capaz de resistir largos períodos de sequía, sin embargo una repentina interrupción en el abastecimiento de agua puede reducir considerablemente el rendimiento y tamaño de la fruta.

En época de activo crecimiento la mora requiere aproximadamente 25,4 mm de agua por semana. Durante el crecimiento de la fruta y época estival el requerimiento hídrico es aún mayor.

El riego por aspersión, y recientemente el sistema por goteo, son los más usados en este tipo de cultivo.

Para obtener su máxima producción es necesario mantener una adecuada humedad en el suelo. Es importante la regularidad en el riego, especialmente durante el crecimiento del fruto, esto dá como resultado mayor grosor de cañas, mayor tamaño de fruto y en consecuencia mayor producción.

No existen reglas generales para determinar las necesidades de riego, debido a que dependen fundamentalmente de la capacidad de retención de agua que posee cada suelo, de las condiciones climáticas y del estado fenológico de la planta. Por ejemplo los suelos pesados y arcillosos pueden conservar tres veces más del agua suministrada a uno 30 cm de profundidad, que un suelo liviano y poco profundo debe regarse con pequeñas cantidades de agua y con mayor frecuencia.

Aún cuando el agua y calidad del suelo son parámetros importantes en la productividad, es necesario considerar que un exceso de agua puede inducir a asfixia radical, pudrición de raíces y desarrollo de flora fungosa.

Un buen programa de riego debe considerar básicamente un buen riego antes de la cosecha y riegos ligeros durante ella, siempre que sean necesarios, y finalmente una vez terminada la cosecha y antes de las podas, se debe realizar un último riego en profundidad.

De los riegos tecnificados, el riego por aspersión con microaspersor colocado a bajo altura es el más recomendado, siempre que se tenga cuidado de no mojar las coronas, lo cual significa un manejo cultural por plantas y no por camellòn continuo.

    2. ANALISIS DE MERCADO

La producción de moras e híbridos tiene mayor importancia en el Oeste de Estados Unidos (Oregon y Washington) y Nueva Zelandia. La principal variedad de moras en el oeste de Estados Unidos es la Evergreen Thomless y sólo existen pequeñas cantidades de Boysenberry y Marion. En California sólo se produce una pequeña cantidad de moras Ollalie.

Se estima que la producción mundial de moras e híbridos es de alrededor de 60.000 ton y en su mayor parte se destina a congelados (75%). La producción interna de Estados Unidos es cercana a las 13.000 ton y el resto de la producción mundial se reparte entre Europa y los países del Hemisferio Sur, tales como Nueva Zelandia, Chile y otros.

El período en que se desarrolla la producción de moras en Estados Unidos va desde mayo hasta agosto, alcanzando su mayor nivel en el mes de junio.

La exportación de moras de Nueva Zelandia se destina mayoritariamente a Estados Unidos llegando fuera de temporada entre los meses de diciembre a marzo y la producción de Chile que se destina a Estados Unidos en estado fresco llega en enero y abril, por lo que estaría compitiendo con Nueva Zelandia en estas fechas.

Los boysenberries son la principal variedad de Nueva Zelandia y sólo se cultivan pequeñas cantidades de las variedades Marion, Ollalie y Aurora. Los rendimientos son muy altos y se exportan grandes cantidades de boysberries a Europa y otros países. Tanto su producción como su comercialización están controladas por el boysenberry Board. Por lo tanto, la superficie tratada está controlada de acuerdo a la demanda prevista, y los mercados de destino también están controlados, para asegurar que los productores no compitan entre sí cuando están desarrollando mercados nuevos.

En cuanto a Europa, sólo existen pequeñas áreas de producción en países como Inglaterra, Francia, Yogoslavia, Polonia y otros, cuya producción se destina a la exportación hacia los países de Europa Occidental tales como Alemania y Holanda, entre los meses de junio y octubre.

        2.1. Mercado Estados Unidos. Importaciones y Exportaciones

Las principales abastecedoras del mercado de Estados, además de la producción interna proveniente de los estados de California, Washington, Oregon y Florida, son Guatemala, Colombia, Chile y Nueva Zelandia.

Estados Unidos se autoabastece entre los meses de mayor y septiembre. Los países del hemisferio sur como Chile, Nueva Zelandia y Colombia compiten entre enero y marzo, además, los dos últimos participan también en los meses de septiembre a diciembre.

Guatemala es otro país abastecedor, siendo su oferta más prolongada en comparación a los países mencionados, desde noviembre a agosto, compitiendo con la oferta interna de Estados Unidos y con los otros países mencionados.

En cuanto a precios, en Estados Unidos los valores promedio para las moras a híbridos provenientes de los países del hemisferio sur tales como Chile, Nueva Zelandia, Colombia y Guatemala, fluctúan alrededor de los US$ 12/kg, siendo el promedio para EEUU de US$ 10/kg, llegando en los meses de mayor producción y oferta a sólo US$ 5,6/kg.

        2.2. Mercado europeo. Importaciones y Exportaciones

El total de moras e híbridos importados por la CEE es comparativamente pequeño respecto a los otros berries. Las moras congeladas representan el 93% del total adquirido por la región. Alemania y Holanda son los principales compradores, con una participación conjunta del 70% del total importado de moras.

Análogamente el caso de las importaciones, el mayor volumen exportado de moras corresponde a congelado, con 2.853 toneladas, de un total exportado de 3.389 toneladas (84.2%) Los principales exportadores son a la vez los principales importadores

Respecto a las importaciones de moras congeladas por parte de la CEE, cabe destacar que Yugoslavia es el principal proveedor con 7.667 toneladas, siguiéndole Chile con un volumen de 3.287 toneladas en 1990, lo que representa un 17% del total adquirido por la CEE.

En relación a los precios, se puede decir que en el mercado alemán la tendencia observada es más bien estable a través de los años, alcanzando un promedio de US$ 4,4/kg para el período analizado, sin embargo, presentan una marcada estacionalidad a través del año, disminuyendo progresivamente desde que aparece la primera producción de moras, con altos precios en el mes de julio US$ 5,9/kg hasta un valor de US$ 3,7/Kg en el mes de octubre.






 








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